Convertir un hobby en tu modo de vida es posible, y Sofía Han (@sofisoftcovers) lo sabe de primera mano. Esta talentosa sevillana lleva bailando desde los tempranos cuatro años. Motivada por leyendas como los Backstreet Boys o las Spice Girls, su pronta destreza en la danza ya captó la atención por redes del reconocido coreógrafo Rafa Méndez.
Pero sus primeros pinitos en el K-Pop surgieron en 2012 cuando nació el grupo M5. Debutó con la corporación en el Salón de Jerez e incluso llegaron a la final del primer K-Pop World en España celebrado en Madrid. En 2016 recibieron su primer premio con la interpretación de Rhythm Ta de iKON. Pero los triunfos no se quedaron ahí, ya que esto sería solo el principio de un sinfín de éxitos.
Ha llegado a colaborar con otros grupos sevillanos como 24Seven, y ahora disfruta de lo que más le gusta de la mano de sus nuevos compañeros, SYNK. Con ellos ha conseguido ni más ni menos que dos premios en concursos de baile (JapanZone, MairenaGo) y una mención especial en Mangafest, todo en este mismo año.
Aunque se formó como profesora de idiomas, su pasión por el baile la incentivó a tomar caminos inesperados. Armándose de valor, la bailarina se arriesga para emprender su propio proyecto personal y montar una academia en la que compartir todo lo que lleva dentro.
¿Quieres conocerla? ¡Sigue leyendo!
Cuéntanos un poco sobre ti, ¿quién es Sofía Han?
Sofía Han es una persona de 28 años muy apasionada del baile. Llevo bailando desde que tengo cuatro años y por eso también me metí en el K-Pop. Tengo vocación por ayudar y enseñar, y básicamente todo lo que me define ahora mismo es eso.
¿Desde cuando bailas? ¿Tienes algún coreógrafo favorito o referente en el mundo del baile?
Siempre he bailado de manera autodidacta aunque de los cuatro a los ocho años fui a clases de danza clásica española (flamenco). Como coreógrafo americano tengo de referente a Kyle Hanagami. Ha coreografiado a Blackpink, también a Red Velvet... De Corea me gusta Lia Kim, que es de la academia 1MILLION y ha sido coreógrafa de MAMAMOO, de Jessi...
Siempre has mostrado interés por lo artístico, ¿hay algún talento oculto u otro hobby que debamos conocer?
Desde hace un año y medio empecé de manera autodidacta a tocar el ukelele, además cuando tenía 14 años tocaba el piano y desde hace poquito estoy asistiendo a clases de canto.
¿De cuándo viene tu pasión por la cultura coreana?
Justamente desde hace doce años. En 2010 una amiga me enseñó cuando estábamos en el instituto a TVXQ y a Girls Generation. A TVXQ ya los había escuchado porque hacían los opening de One Piece y no sabía que eso era K-Pop. También escuchaba a BOA porque había una canción en inglés que me gustaba mucho. Vi los bailes y como a mi me encantaba tanto bailar, dije: “esto es muy llamativo, me gusta este rollo, es mi estilo”. Vi que abarcaban un poco de todo, que no se quedaban en un solo estilo y dije: “de aquí se puede sacar mucho provecho y aprender mucho”.
¿Cómo nació tu academia SH Entertainment?
Todavía no es una empresa como tal, ahora mismo es más un proyecto. Yo empecé a trabajar en una academia en la que estuve un par de años y no me gustaban las condiciones, así que me fui pero preguntándole primero a mis alumnos si ellos estarían dispuestos a seguir conmigo en un lugar mejor, porque por ejemplo, la sala no estaba bien acondicionada. Este año ha sido el primer curso que he hecho por mi cuenta y eso ha ido subiendo como la espuma. Estoy más contenta porque voy a mi bola y lo organizo todo mejor. No tengo que estar dependiendo de una persona por encima de mí sobre lo que puedo o no puedo hacer. Hay más libertad. Mi antiguo jefe no tenía ni idea de baile y cuando me ordenaba cosas yo decía: “es que eso no es tan fácil de hacer”.
¿Cómo supiste que querías hacer del K-Pop tu fuente de ingresos?
No es que yo lo buscase queriendo. Es más una cosa que me llegó cuando iba a empezar a estudiar el máster para ser profesora de español para extranjeros. Empecé a trabajar ahí porque necesitaba ingresos en ese momento hasta que pudiera ser profesora. Pero no tenía ni idea de que la cosa “iba a subir tanto”.
¿Ha sido difícil?
No fue tanto desde cero porque mis alumnos han seguido conmigo. Ellos me han ayudado mucho porque la mayoría han sido por el “boca a boca”; ninguno porque me haya visto en Instagram y nunca me he promocionado por redes sociales como profesora. Ellos han ido hablando y han ido consiguiendo alumnos para mí. Pero todo eso sin yo decirles nada y así la cosa ha ido creciendo. No ha sido tan complicado porque solo tenía que buscar salas para dar la clase y en el momento en el que la tienes todo “va rodado”.
¿Qué es lo que más disfrutas de tu trabajo?
Mis alumnos y estar con ellos porque he hecho de mi trabajo algo terapéutico. Cuando yo me encuentro mal o estoy baja de ánimos es llegar a clase y se me pasa todo, y para ellos pasa lo mismo porque me lo han dicho. Entre todos nos ayudamos y si tenemos un momento malo eso desaparece. De repente entras en un espacio-tiempo de buen rollo que parece que no hay problemas en la vida.
¿Y lo que menos?
El poco tiempo que tengo para las clases, porque si por mi fuera yo no echaba dos horas a la semana, haría cuatro u ocho jajajaja. Tendría a todos los alumnos conmigo y los haría idols.
Cuéntanos alguna anécdota divertida de clase
Uff son muchas porque mis alumnos dicen muchas tonterías durante las clases. Pero en la última gala tuve que tirar de una alumna y me hizo mucha gracia porque me trajo unos focos porque el escenario no tenía mucha iluminación. Entonces le dije que si podía pasar por delante del escenario porque ya estaba el público sentado y la gala ya había empezado. Pero ella se empeñó en pasar por detrás de las cortinas aunque la gente ya la había visto y yo le dije: “oye que puedes pasar por delante”, y me contestó que había que ser profesional y pasar por detrás de la cortina. Eso es una “chorradita” comparado con la de cosas que pasan durante todo el año.
¿Cuáles son tus metas profesionales y objetivos de futuro? ¿Te ves trabajando toda la vida en esto?
Hace unos años si me veía de profesora de idiomas toda mi vida, pero ahora mismo todas las metas que tengo me las pongo a corto plazo porque yo pensaba llevar la vida por un lado y al final ha sido como “por ahí no”. No creía que con la academia me iban a llegar cada vez más alumnos y todo iba a ser tan “explosivo”, pero no se hasta donde va a llegar eso, porque a lo mejor el año que viene no tengo alumnos y la moda del K-Pop se ha pasado, o puede que pase dentro de diez años, o no pase nunca. Si que me he planteado el abrir una academia de K-Pop, pero tengo que crecer más para ver la demanda que tiene. Estoy tanteando la situación.
¿Cuál ha sido tu experiencia más memorable como fan de la cultura asiática?
Te puedo contar varias. La primera vez que fui en 2014 tenía una profesora de coreano que trabajaba para la KBS en la radio. Consiguió llevarnos al programa Music Bank y mis amigas y yo pudimos ver el pre recording de artistas como Sistar, Hyuna, Infinite… Cuando salimos se nos acercó un señor que decía ser productor de la KBS y nos preguntó que cuál era nuestro grupo favorito, y en ese entonces era EXO pero como ese día no estaban, dije Block B. La mayoría de mis amigas contestaron que les gustaban todos los grupos y en Corea eso no está bien visto porque no te catalogan como una “buena fan”. No puedes ser multifandom. Pero una de ellas dijo B1A4, entonces nos llevó dentro a la zona de backstage y nos dijo: “vais a conocer a B1A4 y a Block B”, y nos quedamos en plan: “¿¡cómo!?”. El hombre les dijo que si nos podíamos hacer una foto y como yo estaba en shock, me empujó y me choqué con uno de ellos. Tenía delante a Kyung y a U-Kwon. Uno de ellos me preguntó que de dónde era y después de contestar que de España, U-Kwon empezó a cantar: “bésame” y yo lo seguí, “bésame mucho”. También nos encontramos a Luhan de EXO y a Amber de f(x).
La segunda vez me encontré en la calle con Henry de Super Junior. Ese año en octubre veía a NCT cada fin de semana porque como los festivales eran gratuitos allí, en ese momento no eran tan famosos y solo habían sacado Fire Truck porque acababan de debutar. También vi a NCT Dream cuando sacaron Chewing Gum y otro día vi salir Shinee salir por la puerta de atrás de uno de sus conciertos. Además, cuando NCT vino a Sevilla por los MTV me choqué con Mark.
Trabajar duro y con ilusión porque el “no” ya lo tienes si no lo intentas. Pero el “sí” solo depende de ti, que ese proyecto salga adelante. Puede costar más o menos dependiendo del proyecto pero si trabajas en ello se puede conseguir. Hay que empezar desde lo más bajo pero no hay nada en el mundo que te impida intentarlo. No se puede partir desde la desgana o la pereza, porque te vas a caer quinientas veces y te tienes que levantar quinientas uno. La vida es eso. Que nada te frene.
Créditos
Fotografía: Maria de los Ángeles Mendoza (@gumiho.mm)
Modelo: Sofía Han (@sofisoftcovers)
Redacción: Mónica Rebollo (@moniica.rm)
Edición de fotografía: Clara Pedrosa (@claracienfuegos)
Estilismo: Clara Pedrosa (@claracienfuegos), Mónica Rebollo (@moniica.rm)
Maquillaje: Paula Trigo (@makeupbypaula.t)
Peluquería: Magdalena Mosulén (@magdamkp)